18 de agosto de 2009

Lo que más me gusta de las fiestas

Y tiene mucho mérito. VIII Concurso Internacional de Estatuas Humanas.

Lo que menos... los toros. Y parece que a los que visitan este humilde rincón también. 81% en contra de la "fiesta nacional" en Leganés. Lo del domingo y el chaval de 16 años, lamentable. ¿No decía el Alcalde que sólo podrían intervenir en los encierros "los mayores de 18 años con calzado adecuado y sin presentar ningún síntoma de embriaguez"?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Completamente de acuerdo contigo.
Ayer a última hora vi las estatuas humanas y, cada una en su estilo, todas eran francamente buenas. La calle Juan Muñoz estaba abarrotada de gente disfrutando con el concurso.
El concurso de estatuas humanas demuestra que la gente aprecia y disfruta con actividades artísticas de calidad, y no hace ninguna falta potenciar la cultura popular más baja y grotesca como los concursos de romper guías telefónicas o sandías a cabezazos para que la gente se lo pase bien en las fiestas, como parece que entienden los populistas y demagogos gobernantes locales.

Anónimo dijo...

Ha quedado patente y notorio, lo que para IU de Leganés es relevante; son los TOROS.

Con la mitad de esfuerzo y entrega que han puesto en los encierros, en la premura por subvencionar al gremio de la tauromaquia, otro gallo cantaría en lo referente a la Educación y atenció a la infancia; para que luego digan que todo lo paraliza la COMUNIDAD DE MADRID.

Cuando Septiembre reaparezca en escena, con los consabidos problemas que dejó el curso anterior, comenzarán las tarjetas rojas a los desequilibrantes resultados de la "Perezosa gestión" Municipal.

Que contradicciones más decepcionantes nos regala esta Izquierda de nada.

(ª¿ª)_

_María.

Anónimo dijo...

Y en el último encierro, se palpó otra vez la tragedia. Alguien en el suelo tras haber recibido un traumatismo, los toros llegando.... menos mal que un hombre joven tiró del que estaba caído y le salvó la vida.

Más adrenalina para esas vidad insulsas que se estremecen viendo correr, o a esas otras tan vacías que calman sus necesidades expiatorias y sus reafirmaciones pendientes poniéndose delante de los toros en un encierro.

Y lo peor de todo, el espectáculo es subvencionado por un ayuntamiento que se dice progresista.

Que cada uno se pague sus deficiencias espirituales y se busque la actividad física que quiera. Yo lo hago así y soy menos esclavo.