3 de enero de 2008

Esto sí que es un juicio rápido

Tenía un profesor en la facultad que decía que las buenas noticias no eran noticias. La que les traigo ahora, es la demostración de que el catedrático estaba muy equivocado. Hay veces que merecen la pena ser elevadas a la categoría de noticias y como tal la elevó yo a categoría de entrada.

Ocurrió ayer en Oviedo, una de mis ciudades preferidas y, por cierto, regida por un alcalde popular desde tiempos inmemoriales (Gabino de Lorenzo). La he sacado de La Nueva España (aquí la pueden ver completa) y cuenta el motín que se produjo en una de las calles céntricas de la ciudad. Un agente de la Policía Nacional increpó y zarandeó "con muy malos modos", según testigos, a un inmigrante que practicaba la venta ambulante, el ejercicio bautizado como top manta. El policía zarandeó e insultó al inmigrante. Una centena de transeúntes le recriminó su acción, llegaron a presionar tanto al policía que éste acabó devolviendo la mercancía incautada al inmigrante.


Oviedo el mejor destino y más con acciones como ésta: MUY RECOMENDABLE

Este juicio rápido y popular acabó con el inmigrante marchándose del lugar y con los vecinos aplaudiendo al policía que en un principio era increpado por la turba.

Hay veces que merece mucho la pena leer estas noticias... te quedas con un buen regusto y compensa el tiempo y el sabor agrio de otras muchas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es noticia, desgraciadamente, por lo insólito. Yo he visto escenas de solidaridad frente a la policía en asuntos de tráfico, pero por un top-manta, ya es un hecho extraordinario. O fue muy desmesurada la actuación del polícia, de auténtico maltrato, o tuvo suerte el inmigrante que pasase por allí alguna persona especialmente sensibilizada con la inmigración y sus dificultades para sobrevivir, y que hizo saltar la chispa de la solidaridad en los demás.
Lo habitual no es la escena de Oviedo que recogió la prensa. También dice el periódico, que el inmigrante, en cuanto se fue el policía salió por pies, sabiendo que lo sucedido fue sólo un respiro para largarse de allí y no perder la mercancía, pues al rato llegaron más policías que posiblemente lo hubieran detenido.
Una anécdota, que contada como lo hace el periodista de La Nueva España, resulta muy apropiada para estas fechas, pues no deja de ser un bonito cuento de Navidad.

Unknown dijo...

Y por aquì, en Argentina, que ùltimamente han llegado algunos españoles què, a pesar de no ser indocumentados, cubrieron con una manta a Aerolineas Argentinas y a Austral ¡¡ Y DESAPARECIERON INMUEBLES, AVIONES, 900 PALOS VERDES, Y VAYA A SABER QUE OTRAS COSAS !!...
Inmigrantes eran los de antes !

Carlos Hugo Lavaselli.-
Banfield, pcia. de Bs. Aires,
Argentina.-
inquirimientosya@gmail.com