18 de octubre de 2007

El País contra El País

Uno que ya va haciéndose mayor, que no viejo, pensaba hace unos días que era un idealista utópico, una especie en extinción estos días, sobre todo después de leer el editorial de El País sobre el Che, titulado Guevara Caudillo. Con el paso de los días, se descubrió que había más de un ingenio utópico. A la redacción del "diario independiente de la mañana" comenzaron a llegar multitud de cartas, e-mails (entre ellos uno mío) y numerosas llamadas telefónicas. Todas criticando la frivolidad con la que se había tratado una de las figuras más emblemáticas del siglo XX.

Al mismo tiempo, descubrimos como el mismo diario, diez años atrás, había dedicado un editorial donde se decía justamente lo contrario. Aquel se titulaba "Vuelve el Che". Yo mismo dije: "pero bueno o mucho ha cambiado el cuento, el que ha cambiado ha sido el cuentista del editorilista". Pues bien, para cerrar el círculo, hoy, el mismo diario, El País, publica en su páginas de opinión lo siguiente:


La Redacción discrepa del editorial sobre el Che

La Redacción de EL PAÍS quiere mostrar su disconformidad con el editorial titulado Caudillo Guevara, publicado el pasado día 10 de octubre. Más de dos tercios de los redactores
(250) consideran que el texto publicado no abordaba en su totalidad la figura de un personaje como el Che Guevara que, con sus luces y sus sombras, es lo suficientemente compleja para haberla tratado como si no hubiera una escala de grises. El Estatuto de la Redacción contempla la posibilidad de discrepar de un editorial siempre que se logren reunir las firmas necesarias, que cifra en un mínimo de dos tercios de los redactores. En ejercicio de este mecanismo de transparencia y democracia interna, único en la prensa española, se ha habilitado este espacio para dejar testimonio de nuestra discrepancia.

El Comité de Redacción, en nombre de los firmantes 18/10/2007


Curioso, parte de los trabajadores de El País contra lo que decía un editorial del propio periódico. Bueno veo que los utópicos idealistas somos muchos. A ver si un día nos juntamos y hacemos algo mejor de esto, o al menos algo más justo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Se te olvidó poner que al día siguiente de la publicación de las cartas al defensor del lector y al director contra el editorial de El País, este periódico publicó un artículo de Josep Ramoneda a favor del polémico editorial y varias cartas en contra de la carta de Vidal-Beneyto. Así que con el comunicado del Comité de Redacción de hoy en contra del editorial, la cosa queda en tablas. Fifty-fifty.
Defender el mito del Che para no acabar con los sueños de transformación social de muchos pueblos oprimidos por una vía similar, es una forma de autoengaño ¿no crees? A estas alturas, habría que analizar si el modelo de transformación social que encarna el Che es válido o no para ponerlo en práctica actualmente. Si mantenemos el mito para que los más desposeídos conserven la esperanza, se le da al mito del Che una dimensión religiosa, alienante, similar a la vida eterna para los cristianos, pero no sirve para transformar la sociedad, sino todo lo contrario.